El legislador provincial Federico Sciurano (Unión Cívica Radical) justificó su acompañamiento al pedido de autorización del Ejecutivo para endeudarse millonariamente en dólares con el objetivo de encarar obras de envergadura que se enmarcan en la reconversión de la matriz energética de la provincia, para dar sustento al creciente desarrollo industrial.
Entre líneas, el legislador radical le contestó a su correligionario, el senador Nacional Pablo Blanco, quien por Radio Universidad 93.5 cuestionó a los legisladores fueguinos que “de la noche a la mañana aprobaron USD 141 millones porque sí”, al tiempo de denunciar que ahora Tierra del Fuego “está por lejos en el primer lugar” de las provincias con más deuda en relación con cantidad de habitantes.
Primeramente, Sciurano enfatizó que el dictamen de la Comisión de Economía para la autorización “fue firmado por unanimidad” con la única ausencia de la legisladora Victoria Vuoto, justamente única parlamentaria en votar en contra del proyecto.
Con astucia, el ex intendente enumeró una larga serie de leyes de endeudamiento votadas por la Legislatura en los últimos años, todos proyectos que “fueron acompañados por Pablo” cuando fuera legislador provincial por varios años.
E hizo especial énfasis en la última ley, la 1142, votada por la Legislatura que integraba Blanco en enero de 2016, con un listado de innumerables obras de diversa importancia por un monto total de USD 200 millones, 60 de los cuales aún permanecen depositados en las cuentas oficiales.
En clara alusión a la contradicción entre lo que Pablo Blanco votaba cuando era legislador y lo que ahora critica siendo opositor en el Congreso Nacional, Sciurano distinguió que “todos los préstamos, desde la ley 278 a la 1132, han sido garantizados con recursos provinciales, si la provincia no paga, la provincia deja de cobrar regalías, como el último crédito de USD 200 millones. En este caso en particular, es la primera vez en la historia que la garantía es del Gobierno nacional, no hay recurso provincial en riesgo” planteó. Para dar lugar luego a una singular y teledirigida recomendación: “si vamos a dar opiniones, es importante dar un panorama completo de la realidad, porque la comunidad no tiene la obligación de saber esta información”, amonestó.
También se defendió Sciurano a cuestionamientos que pesan sobre casi la totalidad de los legisladores de acompañar monolíticamente todas las iniciativas oficiales: “la Legislatura, a diferencia del período anterior, ha tenido un enorme trabajo para conseguir una mayoría agravada. No ha habido ningún proyecto presentado que no haya sido modificado en comisión por las propuestas de los distintos bloques, no ha habido uno solo, justamente por la diversidad ideológica de la Legislatura”.
Consultado en términos políticos y hasta personales sobre las razones por las cuales el senador Blanco pareciera dirigir todas sus críticas sobre su accionar, Federico Sciurano respondió: “Yo a Pablo lo quiero mucho, habría que preguntarle a él. Yo soy funcionario público y no hago mis primeros pasos en esta actividad. Si Pablo tiene que decir algo, tiene el derecho. Yo me siento muy tranquilo con mi trabajo todos estos años y no me gusta hablar con subtítulos, cuando digo algo lo digo de frente march, como corresponde. Y me hago cargo”.
