Por Verónica Benaim, corresponsalía en Capital Federal-. Taxistas de todo el país se movilizaron este mediodía a Plaza de Mayo para reclamar al gobierno nacional la expulsión de la aplicación UBER que lleva tres años funcionando en nuestro país y de la empresa Cabify.
Frente al Cabildo, el titular del Sindicato de Peones de Taxis Omar Viviani reclamó que “el gobierno nacional acate los dictámenes judiciales que determinan que UBER es ilegal y sin embargo siguen funcionando”.
Además, comentó a la prensa que “vamos a entregar el petitorio que tiene una gran cantidad de firmas y esperaremos ser llamados por algún funcionario nacional”.
En ese sentido, Jorge Celia, Presidente de la Federación Nacional de Propietarios de Taxis, le dijo a este medio que “Nuestra federación está representada por 32 entidades en todo el país” y agregó: “Los compañeros de Ushuaia que pertenecen a esa federación por una cuestión de kilómetros no podían enviar móviles, pero nos mandaron dos banderas por correo para que Ushuaia esté presente en esta movilización”.
Según explicó Celia desde Ushuaia “hay cierta preocupación porque están llegando muchos cruceros y eso hace de que UBER tenga intenciones de penetrar ese mercado, cosa con la que obviamente nosotros estamos en contra”.
Cabe recordar, que en 2017, el Concejo Deliberante de la Capital fueguina aprobó por unanimidad prohibir a través de la aplicación de teléfonos móviles el ofrecimiento y la prestación de servicios de transporte urbano de pasajeros de cualquier modalidad que no sean autorizados por la Municipalidad, por los que UBER hasta el momento tiene restringido el funcionamiento.
Por su parten en diálogo con FM MASTERS, la vice presidenta de la Federación Nacional de Propietarios de Taxis, Ada Veiga Ricco manifestó que “entendemos que este conflicto además de tener una solución por la vía legal la debe tener por una cuestión política porque son quienes están permitiendo por omisión que esto siga funcionando, posea el Estado es responsable de esto que está pasando”.
«Los taxistas decimos se terminó la paciencia», comienza el documento que se leyó en Plaza de Mayo y cuenta con adhesiones de muchos sectores del país.
“En estos días se cumplen 3 años del desembarco prepotente de la multinacional UBER a la Argentina. Lo han hecho desconociendo y burlando todas y cada una de las leyes que regulan el transporte público de pasajeros, la seguridad vial, el trabajo registrado, las impositivas y aportes previsionales», continúa el comunicado que informa que «se ha multiplicado su operatoria en la Ciudad de Buenos Aires y otras ciudades del país ante la mirada impávida y hasta cómplice del gobierno nacional, el de la ciudad y provinciales, que sólo han atinado a medidas tibias e incluso complacientes a pesar de los reclamos, luchas y movilizaciones del gremio taxista.
Por último, establece: «Esperamos que las máximas autoridades de la Nación escuchen y atiendan nuestros justos reclamos, no hay espacio para soluciones a medias. Deben saber que estamos dispuestos a defender nuestra actividad taxista que ocupa directa e indirectamente a más de 180.000 familias a lo largo y ancho del territorio nacional”.