presidente Mauricio Macri anunció desde la provincia de Santa Fe el lanzamiento de un paquete de medidas de ayuda financiera para las pequeñas y medianas empresas por 100.000 millones de pesos.
«Necesitamos que las PyMEs puedan salir adelante, desarrollarse y transformarse en medianas y mañana en grandes empresas, porque si una PyME crece, genera mas trabajo y necesita más gente», sostuvo el Presidente.
El Jefe del Estado realizó el anuncio en la localidad de Timbúes, acompañado por el ministro de Producción y Trabajo, Dante Sica, durante un acto llevado a cabo en la planta industrial de la firma Renova.
También participaron el gobernador de Santa Fe, Miguel Lifschitz; el ministro de Transporte, Guillermo Dietrich; el secretario de Agroindustria de la Nación, Luis Etchevehere; el secretario general de la Presidencia, Fernando de Andreis, y el intendente de la ciudad de Santa Fe, José Corral, entre otras autoridades.
Antes del acto el Presidente encabezó una reunión de la Mesa de la Soja que convocó a funcionarios del Gobierno y representantes de cámaras, empresas y sindicatos de ese sector productivo.
Macri señaló que este conjunto de medidas, que aseguran un importante auxilio financiero para las PyMEs, es para que las empresas del sector puedan «cruzar el puente en esta transición entre lo que nos pasó y esta nueva normalidad en la que estamos entrando».
Sostuvo que con ese objetivo «ponemos a disposición 100.000 millones de pesos para líneas de crédito» y afirmó que esto permitirá que las pymes puedan recuperar su capital de trabajo, descontar cheques y cumplir los compromisos con sus proveedores sin tener que pagar «tasas imposibles».
Precisó que las líneas de crédito «van a tener tasas de entre el 25 y el 29 por ciento» y apuntó que estarán disponibles en 27 bancos entre estatales y privados.
Macri remarcó que es una ayuda para seguir avanzando «hacia esa normalidad y esto es gracias a que estamos logrando una estabilidad cambiaria y que tenemos un Banco Central que tiene una política monetaria muy clara».
«Todas estas cosas que nos han pasado, todas estas cosas que hemos tenido que enfrentar nos han servido para aumentar nuestra capacidad de entendimiento de cuales eran nuestros problemas», afirmó.
«Y entender que si queremos crecer durante muchos años en forma consecutiva tenemos que hacer los trabajos de base, construir los cimientos y hacer las reformas en serio para que las futuras tormentas que van a seguir apareciendo en el mundo no nos afecten como nos afectaron el año pasado», agregó el Presidente.
Macri previno que «se necesita trabajar durante muchos días, muchos meses y años para que todas estas cosas vayan floreciendo».
«Pero lo importante es que, si las hacemos, cada día estamos un poco mejor, como hoy que claramente estamos mejor parados frente al futuro que tenemos que construir que en el 2015, porque hemos trabajado en muchos de esos cimientos y esas bases», indicó.
Macri abogó finalmente en favor de que «sigamos dialogando, trabajando en equipo y resolviendo los problemas que tenemos, porque, si nos escuchamos un poco entre nosotros, los argentinos, todos los problemas tienen solución».
«Que nos hayamos demorado más no significa que sea imposible; lo que significa es que las cosas que valen y que son para siempre, cuestan», afirmó.