Una novedosa propuesta deportiva se compartió el pasado domingo en el sendero del Cerro Cortez, a través de la organización de los integrantes de la Asociación de Ciclismo de Montaña Extremo (ACME) con el desarrollo de la fecha especial bajo la modalidad Dual, que reunió a 24 corredores en plena acción deportiva. El descenso de montaña de la capital provincial tuvo su continuidad con una carrera distinta a las exhibidas hasta entonces. Fue a través de parejas de corredores, que se fueron eliminando entre sí hasta definir a los mejores de la competencia.
El corredor David Correa dio detalles del evento deportivo desplegado en el Cortez y puntualizó que «estuvimos en nuestro lugar habitual. Estamos, de a poco, reacondicionando diferentes lugares y que en cada fecha tengamos un circuito distinto». Y expresó las sensaciones de esta nueva oferta competitiva: «Experimentamos esta nueva modalidad de competencia del descenso como es el Dual, que es correr de a dos en un mismo circuito».
Tras una bajada clasificatoria, los organizadores procedieron a efectuar la grilla de emparejamientos según los tiempos, y diagramaron las llaves eliminatorias. De esta manera, dos exponentes se medían en un mismo trazado buscando el mejor de las dos pasadas; «con mismos obstáculos, bajo una largada en común. Hubo varias mangas por repechaje y eliminación directa para completar una jornada muy entretenida».
«En la previa hubo mucho entusiasmo y ansiedad por lo nuevo. Porque todos estaban acostumbrados al descenso puro, que se caracteriza por la velocidad; entonces, desde la organización, se nos ocurrió pensar qué podíamos hacer para darles otro enfoque y que se dé una competencia veloz pero que desarrolle técnicamente y forzar los errores; y aprender a cambiar las líneas», manifestó Correa.
Desde la clasificación, los corredores debían buscar una estrategia clara y estar muy concentrado. En este sentido, David profundizó: «Si salías entre los primeros te tocaban cruces con los competidores más rápidos; había que ser muy criterioso y cuidadoso porque, en momentos, salías de una curva y cualquier error costaba una caída o el paso del adversario».
«Tenemos muchos chicos nuevos y la idea de esto es que puedan sumarse cada vez más. Desde la organización se intenta incentivar y motivar a todos, y que cada vez se generen más propuestas para continuar el crecimiento; que nos podamos nutrir de las otras modalidades del ciclismo y mejorar el entrenamiento y competencias internas», sentenció.
Por su parte, Federico Jimeno, también integrante del staff organizador de ACME, dijo que, «para los chicos, fue una actividad muy entretenida, en un escenario atípico del Cortez; ya que habitualmente nuestro circuito consta de 1 kilómetro de longitud, y como iba a ser dual y contar con muchas carreras, decidimos acortar el trazado y quedó de alrededor de 400 metros con slalom, amplio para que puedan pasarse en competencia y muy técnico». Y añadió que «se dio un tramo rápido, que fue disfrutado, desde luego, por todos los presentes; con peraltes y varias curvas».
Además, el organizador expuso que se incentiva a los riders a que se consoliden a nivel local y que tengan la posibilidad de salir a competir al norte del país, donde son claros protagonistas. «Y aprovechamos esas ideas que traen de las distintas citas para volcarlas en las competiciones locales. Esto permite modificar los circuitos y adaptarlos a las carreras que se tienen hoy en día».
Es preciso destacar que el podio en la competencia estuvo integrado por Uriel Puigpino, que fue el vencedor de la prueba; Brian Quintana, en el segundo lugar y Miguel Snaider concluyó tercero. Mientras que el cuarto sitio de las colocaciones finales fue para Francisco Alvarez.
Los integrantes de ACME ya piensan en la próxima competencia del certamen fueguino de descenso que podría realizarse a fines del presente mes en la capital provincial.
Fuente: Tiempo Fueguino