La senadora fueguina pidió disculpas públicas por haber cuestionado la salud mental del presidente. Pero insistió en su posición de reclamarle a Milei la renuncia, por no considerarlo apto para el cargo.
La senadora fueguina Cristina López, generó una fuerte controversia en la reciente sesión del Senado al cuestionar la idoneidad mental del presidente Javier Milei para ocupar su cargo. Sus declaraciones no sólo impactaron en el ámbito político, sino que también resonaron en diversos sectores de la sociedad.
López inició su intervención en FM Master’s pidiendo disculpas por si sus palabras sobre la salud mental del presidente ofendieron a alguien, pero dejó claro que mantenía su postura: «Quiero pedir disculpas, si alguien se sintió ofendido por lo que dije cuando me referí pura y exclusivamente al presidente Milei. Las reacciones más que nada fueron los trolls y uno que otro que no entendió bien lo que dije». Sin embargo, enfatizó que muchos ciudadanos, especialmente de Tierra del Fuego, la felicitaron por expresar lo que ellos pensaban, pero no eran escuchados.
La senadora sostuvo que Milei «tiene problemas de salud mental» y que «no está capacitado en términos políticos para seguir siendo el jefe de Estado», sugiriendo que debería renunciar o enfrentar un juicio político. «Para mí es obvio que no está capacitado en términos políticos para seguir siendo el jefe de Estado, tendría que renunciar ya», afirmó. Y añadió que para dirigir un país se debe estar «apto psicológicamente y él no lo está».
López defendió su derecho a expresar su opinión, subrayando que lo hacía en defensa del pueblo y sus convicciones. «Más allá de los fueros, tenga fueros o no, yo nunca tuve fueros, siempre dije lo que pensaba, nunca me callé la boca», expresó. Reiteró su compromiso con su estilo pasional y su rechazo a permanecer en silencio como, según ella, hacen otros legisladores.
La senadora también criticó duramente al presidente por sus declaraciones ofensivas hacia diferentes sectores y sus políticas que, según ella, perjudican al país. «Él ya teniendo la investidura que tiene, representando un país, dice asesinos de pañuelos verdes, idiotas útiles, degenerados. A los periodistas les dijo mentirosos, calumniadores, corruptos, imbéciles, ensobrados, ¿cómo se le dice?», cuestionó López.
En su intervención radial, destacó acciones específicas del presidente que consideró inaceptables, como «esconder medicamentos oncológicos» y «paralizar la obra pública dejando en la calle a más de 100.000 trabajadores». Según ella, estas acciones demuestran una grave incapacidad para gobernar.
La votación en el Senado, en la que la vicepresidenta Villarruel desempató a favor del presidente, dejó a López y a otros senadores con un «sinsabor». «Fue un balde de agua fría prácticamente. Cuando estaban los 36 y 36 y esos minutos decisivos cuando estaban en la pantalla y cuando terminó de desempatando Villarruel, me quería morir prácticamente», confesó.
Finalmente, la senadora Cristina López expresó su esperanza de que la Cámara de Diputados rechace las medidas propuestas por el presidente y que los legisladores fueguinos Santiago Pauli y Héctor Stefani «voten a favor del pueblo y que no levanten la mano» en apoyo a estas cuestionadas leyes.
Las declaraciones de la senadora han generado sin dudas un amplio debate sobre la situación política actual y la capacidad de liderazgo del presidente Milei, reflejando la profunda polarización y las tensiones dentro del sistema político argentino.
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