Daniel González, vicepresidente de la Cámara de Comercio de Ushuaia, compartió su análisis sobre las medidas gubernamentales adoptadas por el presidente Javier Milei, y las consideró una respuesta favorable al empresariado argentino, que espera por este tipo de definiciones desde hace mucho tiempo: “Venimos retrasados en la modernización, de hecho, CAME respalda las medidas», expresó González por FM Master’s, refiriéndose a la postura pública de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa.
El representante del empresariado comercial resaltó la importancia de la apertura económica, señalando que esta generaría igualdad y más oportunidades de empleo. «Si observamos cómo funcionan los países más desarrollados, estamos muy atrasados, hay mucha capacidad», añadió. No obstante, su entusiasmo fue matizado al discutir las importaciones: «Se libera, pero se menciona regulación por ley. Las reglas para mí no están mal, están bien, una economía que no esté condicionada netamente a subsidios», celebró.
González también compartió sus experiencias personales, mencionando las dificultades durante el gobierno anterior para importar mercancías. «Cuando la importación es muy restrictiva, el negocio lo hacen unos pocos claro, y eso no me parece bien, me parece que las posibilidades las tenemos que tener todos”, subrayó.
Al proyectar las implicancias de las medidas en el empleo estatal en Tierra del Fuego, el vicepresidente señaló: «Es nuestro cliente principal. La actividad puede bajar, los ingresos también». Sin embargo, defendió la iniciativa del gobierno nacional de flexibilizar las relaciones laborales: “La modernización en la relación laboral es algo que el empresario argentino, el comerciante necesita hace mucho tiempo. Vos no podés estar pensando primero en el juicio que te va a hacer el empleado antes de tomarlo. Debería ser un orgullo, debería ser muy positivo que vos sumes personas a tu empresa y en realidad en estos últimos años, vos lo ves como un problema eso”.
En el contexto de una persistente inflación, González reconoció que la caída en las ventas ya se percibió en diciembre. Aunque destacó que el sector turístico actualmente no resiente estos efectos debido a la temporada alta, anticipó un cambio después de este período: «En un sector netamente relacionado al turismo, no se está notando porque estamos en temporada alta, pero cuando dejemos de estar en temporada alta ahí sí vamos a ver los números reales».