El Tribunal Oral de la Justicia Federal resolvió en Ushuaia el juicio oral contra José Onofre Villarroel Soto como propietario de la estancia San Justo, ubicada a 80 kilómetros de Río Grande por la ruta complementaria B.
En diciembre de 2019, un peón de 40 años se trasladó hasta el puesto policial José Menéndez, presentándose ante personal policial para dar cuenta que se había escapado de la estancia por las condiciones deplorables en las que se encontraba, casi sin comida y en condiciones de vivienda indignas.
Una vez en el lugar, se dio intervención al sindicato de los peones rurales, UATRE, el cual realizó la denuncia en el Juzgado Federal por supuesta “trata de personas” en relación a que el hombre casi no cobraba dinero desde febrero a diciembre de ese año, siendo dejado en el lugar al cuidado de la estancia y tareas varias, sufriendo una discapacidad en un brazo.
La situación se agravaba en relación a que el hombre había llegado recientemente de la provincia de Salta, en un estado máximo de vulnerabilidad y le tenían retenido su DNI, por lo cual estaba en un estado de sumisión absoluta.
Finalmente, el Tribunal de Juicio Oral de la Justicia Federal resolvió condenar a Villarroel Soto a la pena de 8 años de prisión, al considerarlo la propia víctima como quien lo había llevado y retenido en el lugar, dado que, actualmente, la titularidad de la estancia sigue en litigio judicial.
El imputado de momento no será detenido hasta tanto el veredicto quede firme, siendo este fallo el primer de sus características en la historia judicial de Tierra del Fuego por “trata de personas con fines de explotación laboral” en un establecimiento rural.