A 37 años de la Guerra, el juez federal Federico Calvete llamara a indagatoria a 18 oficiales y suboficiales del Ejército imputados por enterramientos y estaqueamientos en las Malvinas. En radio Nacional Ushuaia dialogaron con Pablo Vasell, primer denunciante de las torturas que sufrieron los soldados de Malvinas
La denuncia lleva más de 12 años, con dos años previos de investigación administrativa, finalmente, de los 23 casos originales, 18 acusados serán convocados a la primera tanda de indagatorias a fines de junio. Los otros 8 quedarán para una segunda etapa.
La presentación original de la denuncia era por torturas, lesiones graves, un caso de homicidio de un soldado por parte de un cabo, y dos soldados que murieron de hambre, “Recorrí todo el país buscando nuevos casos, entrevistándome con excombatientes” recordaba Pablo Vasell cuando comenzó con la investigación, el número de testimonios que recolecto es cercano a los 200.
En las pruebas presentadas cuentan con testimonios directos, y uno de las pruebas más importantes fue el de la desclasificación de los secretos militares en el 2015, tomando conocimiento de los casos donde los mismo oficiales dejaron asentados los “maltrato a la tropa”, así llamaban a los actos de torturas que ejercían sobre los soldados.
Consultado porqué un oficial termina actuando así con su tropa, Vasell reflexionaba, “para mi es fruto de la formación militar de la fuerza armada argentina del Siglo XX en nuestro país (…) las fuerzas armadas se fueron desprofesionalizando paulatinamente, y la interrupción del orden democrático género que se pase a archivo”.
Se lamentaba y comparaba “No fue a Malvinas, lamentablemente, la tropa de San Martin. San Martin tenía una formación humanista, tremenda, muy sólida” reconociendo que los militares argentinos desde los años 60 fueron perdiendo el valor de la defensa nacional y comenzaron a ver al enemigo dentro de su propio territorio.