Este año, la Provincia de Tierra del Fuego cumple 28 desde la jura de la Constitución provincial. Pero el derrotero legislativo, político y social para que se convierta institucionalmente en un nuevo estado de la República Argentina, había comenzado mucho antes en Buenos Aires. Sin embargo hace 28 años, en Tierra del Fuego, se iniciaba un lento y recordado camino para llegar a la letra fundacional de nuestra Provincia, la Constitución, con la conformación de la Asamblea Convencional Constituyente.
La Ley Nº 23.775, de abril de 1990, y su decreto Nacional Nº 1491/90 determinaron que iniciaba “la etapa histórica de nuestra Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur” donde se constituyó la Asamblea, que redactó la Constitución de la nueva provincia.
Fue así, que luego de las elecciones de diciembre de 1990, el 7 de enero en la capital fueguina, “reunidos los señores Convencionales Constituyentes en el salón de actos de la Escuela Nº 1 ‘Domingo Faustino Sarmiento’, siendo las 19,15 horas, dice el Director de Información y Asistencia Parlamentaria”, Gustavo Blanco.
El funcionario legislativo, dio lectura a las actas de conformación de la Asamblea, cuestión ajustada a la legalidad, donde detalló la presencia de los 19 convencionales elegidos por el pueblo del exterritorio.
Los 19 convencionales que debatieron y posteriormente juraron la letra de nuestra Carta Magna fueron: Luis Alberto Andrade; Luis Augsburger; Pablo Blanco; Miguel Ángel Castro; José Estabillo; Mario Ferreyra; Alejandro Funes; Hernán López Fontana; Demetrio Martinelli; César Marcos Mora; Néstor Nogar; Carlos Pastoriza; Carlos Pérez; Ruggero Preto; Jorge Rabassa; Alberto Revah; Elena Rubio de Mingorance; Rosa Delia Weiss Jurado y Diana Wilson. (Cabe recordar, que luego el convencional Revah dejó su cargo, asumiendo Ricardo Furlan).
En tanto, el Director de Información y Asistencia Parlamentaria indicó que la convencional Weiss Jurado debía asumir la presidencia provisional de la Asamblea y Carlos Revah, ocupó la secretaría por ser el de menor edad.
En ese nacimiento de la Convención Constituyente, izaron el pabellón nacional un representante por bloque convencional. Augsburger, Funes, Castro y Blanco tuvieron ese gesto inaugural. Acto seguido, los Convencionales Constituyentes prestaron juramento luego que lo hiciera la presidente provisional. Algunos juraron con la formula que incluye a Dios, la Patria y los Santos Evangelios; otros por la que menciona a Dios y la Patria y, finalmente, por la que honra a la Patria. Cabe señalar que se hizo, en consecuencia de la letra de la Constitución Nacional y lo prescrito por la Ley Nº 23.775.
Néstor Nogar, convencional llegado de Río Grande y exintendente de la ciudad norte, tomó la palabra en primer término y propuso como presidente de la Convención a su par de bloque, Elena Rubio de Mingorance. Al no haber otra moción, Weiss Jurado procedió a habilitar la votación nominal donde la propia Rubio de Mingorance se abstuvo de votar.
La votación nominal resultó afirmativa y la presidente provisional la invitó a tomar su cargo como titular de la Convención Constituyente. De inmediato, propuso a los Convencionales reunirse el 9 de enero a las 9 de la mañana, para tratar como único orden del día, el Reglamento Interno de la Asamblea.
Al finalizar ese primer encuentro, la referente de Río Grande habilitó a cada titular de bloque a hacer uso de la palabra, a modo de cierre.
En primer término, Luis Augsburguer, entre otras cosas señaló: “Existen en la vida de los pueblos hechos trascendentales que marcan hitos que quedan grabados en su historia. Sin lugar a dudas, a nadie escapará que estamos en presencia de uno de esos hechos históricos a los que por los designios del destino y de la voluntad popular, nos toca ser protagonistas directos con la responsabilidad y el orgullo que eso trae aparejado”.
En tanto, el convencional Pablo Blanco, consideró esas fechas como “momentos históricos en Tierra del Fuego. Nada más y nada menos que creando los postulados fundacionales de nuestra Provincia. Hemos asistido en estos últimos años a profundos cambios que han definido un perfil social para nuestra Provincia. Del Territorio de antaño, de población estable y con una actividad económica ceñida esencialmente al aprovechamiento de los recursos naturales y a la actividad comercial, ingresábamos en una etapa industrial”, recordó.
El convencional Luis Andrade afirmó ese día que “nos convoca un acto trascendente para toda la comunidad fueguina. Se hace realidad un largo sueño de aquellos que vislumbraron esta Provincia grande, que un día plasmaron en su proyecto político, siendo objetivo de muchos hombres y mujeres que creyeron a pesar de la falta de visión de algunos que la caracterizaron como una utopia, dándonos el tiempo y el acompañamiento del pueblo a través de sus expresiones, la fuerza y la convicción necesaria para llegar a esta instancia”.
Finalmente, el convencional Pastoriza también calificó la Asamblea, su conformación y al futuro debate como “trascendental para Tierra del Fuego. Se me ocurre que es el marco adecuado, el momento oportuno para rendir un merecido homenaje a los primeros pobladores de Tierra del Fuego. Fueron hombres y mujeres que vinieron de diferentes latitudes, pero con un ideal común, el de progresar en paz y en libertad”.